26 may 2025
No hace falta ser Amazon para estar en la mira
Lo que empezó como un correo sospechoso terminó en una pesadilla. Un clic en el enlace equivocado, y de pronto los clientes de la tienda online de Pablo comenzaron a recibir correos extraños. Luego, la web dejó de funcionar. Y en menos de 24 horas, sus datos y los de sus clientes habían sido comprometidos.
El ataque no venía de una banda internacional, sino de un software automatizado que escanea sitios vulnerables y los explota. Porque en el mundo digital, nadie está exento.
¿Qué es un seguro ciber?
Es una cobertura pensada para proteger a empresas y autónomos ante ataques informáticos, pérdida de datos, filtraciones, secuestros digitales o interrupciones del servicio.
Puede incluir:
Coste de recuperación de datos.
Asistencia informática de emergencia.
Indemnización por paralización del negocio.
Gastos legales y defensa ante denuncias.
Gestión de reputación online.
Multas por incumplimiento de la normativa (como la RGPD).
¿Por qué lo necesitás aunque seas pequeño?
Muchos autónomos y pequeños negocios creen que los hackers solo atacan a grandes empresas. Pero la realidad dice otra cosa:
El 70 % de los ciberataques en España afectan a PYMEs.
Muchos negocios no se recuperan tras un ataque.
Un solo error humano (como abrir un archivo infectado) puede costar miles de euros.
Además, el impacto no es solo económico: también puede ser legal y reputacional.
Tipos de ataques más comunes
Phishing: correos o webs falsas que roban datos.
Ransomware: secuestran tus archivos y piden un rescate.
Denegación de servicio: tu web se cae por ataques masivos.
Malware: programas que se instalan sin que lo sepas.
Filtración de datos: se accede a información sensible de tus clientes.
Lo que pasó después…
Pablo tenía una tienda digital de productos ecológicos. Tras el ataque, no pudo operar durante 5 días. Perdió ventas, su imagen se dañó, y tuvo que pagar a un técnico para recuperar el sistema.
Por suerte, tenía un seguro ciber que:
Asumió el coste del especialista informático.
Cubrió los ingresos perdidos durante la caída.
Asesoró legalmente frente a los clientes que exigían explicaciones.
Gestionó la comunicación de crisis con transparencia.
¿Y si no tengo tienda, solo redes sociales?
Aunque tu negocio se mueva solo por Instagram, WhatsApp o una tienda en MercadoLibre o Shopify, estás expuesto. Si te bloquean la cuenta, te suplantan la identidad o vulneran tu base de datos, los efectos son igual de graves.
¿Cómo prevenir sin ser un experto?
Usá contraseñas seguras y únicas.
Actualizá siempre tus sistemas y plugins.
Tené copias de seguridad automáticas.
No abras archivos ni enlaces sospechosos.
Contratá un seguro ciber con respuesta inmediata.
Conclusión
El mundo digital es un gran aliado para crecer. Pero también tiene riesgos. Y no se trata de vivir con miedo, sino de vivir preparado.
Porque si tu negocio depende de internet, entonces también necesita un plan B digital.
¿Querés proteger tu web, tu marca y tus datos?
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